Acabó el receso. Alisten sus cámaras y reflectores. La entrega de las estatuillas más glamourosas del orbe está a punto de concluir. Y porque una vez más usted no lo pidió, es turno de reconocer a lo mejor del deporte en general -en esta ocasión hablaré de todo menos futbol, porque no todo es el deporte de las patadas-. Cruyffut piensa en todos y cada uno de sus lectores, aquí no se discrimina a nadie.
Básquetbol
Sólo tomaré en cuenta a la NBA, ¿por qué? Porque las ligas en México son un desastre debido a las pugnas entre personajes de pantalón largo por obtener la mayor parte del pastel, lo cual deja relegado el aspecto deportivo. En Europa hay buen nivel, pero la difusión es escasa -algún video en la red o en canales deportivos de televisión de paga, no más-. En Sudamérica también se sabe que hay buenos equipos y jugadores, pues sus representantes semana a semana muestran su talento en la NBA, pero una vez más la -nula- difusión es el problema.
A la final de este año llegaron Los Ángeles Lakers contra Orlando Magic. Los Ángeles formó un verdadero conjunto, cohesionó sus piezas a la perfección, dejó de ser Kobe Bryant y cuatro más. Pau Gasol jugó de manera sublime, tan es así que hace unos días fue elegido el mejor jugador europeo por La Gazzetta dello Sport. Bynum y Fisher tuvieron la mejor temporada de sus carreras, y Kobe venció a su mayor enemigo, el ego. En la esquina contraria, Orlando no presentaba tanto talento y espectacularidad, pero su trabajo colectivo y el virtuosismo de su estrella, Dwight Howard -también conocido como Superman-, los llevaron a ganar el título de la Conferencia Este, aunque en la final no opusieron mayor resistencia al perder cuatro partidos contra uno. Ambos equipos -Lakers y Magic- eclipsaron la campaña de escuadras como Cleveland Cavs, con todo y el nuevo rey de la duela, LeBron James; y Boston Celtics con el mejor quinteto titular, liderado por el cuervo Kevin Garnett.
Bajo el panorama descrito, el premio al mejor jugador es para: Pau Gasol. El español le mostró al mundo porqué es el líder de la selección subcampeona en los JJOO 2008. Con el jersey de los Lakers Pau atascó el balón cuando quiso y como quiso, no es el típico centro que sólo sabe encestar bajo el aro. Alienta a sus compañeros, da órdenes, corre, defiende, es el mejor en su posición, porque no sólo se hace cargo de las responsabilidades de la misma, además le brinda un plus al equipo.
Mejor equipo - Sí hay lugar a dudas, pero como bien dice Eduardo Galeano, "la mayor certeza es la que desayuna dudas todas las mañanas", así que a quien le sea otorgado el reconocimiento debe saber que hubo otros que estuvieron a su altura. El ganador es... Boston Celtics. No enloquecí y no soy contreras. Las lesiones mermaron su accionar, pero de haber gozado de plena salud, mínimo hubieran llegado a la final contra Lakers. La calidad de su juego fue altísima, un verdadero deleite para la pupila.
Jugador espectáculo - LeBron James. Nunca olvida a los miles de espectadores que pagan un boleto para entrar a la Arena, y por supuesto, tampoco desdeña a los tele-espectadores, juega para ganarse los aplausos de todos ellos. Disfruta lo que hace, farolea, se sabe observado en todo instante y eso no lo presiona, al contrario, lo motiva para dar lo mejor de sí. Este cuate sí está muy lebrón.
Equipo sorpresa - Oklahoma City. El Thunder sorprendió a propios y extraños en su año de debut. Sí. Fue tan malo que provocó una enorme sorpresa. Una verdadera infamia la temporada de estos muchachos, una lágrima. Un dato: fuentes extra-oficiales de la ciudad de Oklahoma revelaron que la tribu urbana denominada como los emos, registró un 300% en el incremento de sus simpatizantes y afiliados. Se sospecha que los jóvenes decepcionados por el Thunder sean quienes engrosaron las filas de los emos.
Boxeo
El pugilismo está a la expectativa de mis palabras, así que no lo hagamos esperar.
Mejor boxeador - Manny Pacquiao. El Pacman se reafirmó como el mejor libra por libra. Realmente poco puedo agregar respecto a su accionar sobre el ring, pues casi todo está dicho sobre él. Ha sido campeón en seis divisiones diferentes. Reventó al inglés Hatton y al boricua Miguel Cotto durante este año, no les dio tregua en ningún instante; se encuentra en la madurez de su vida profesional y si se arma la pelea con Floyd Mayweather estoy seguro que por fin alguien pondrá en su lugar al ego hecho persona, osea, Pacquiao sí le rompe el hocico a Mayweather.
Mejor boxeador - Manny Pacquiao. El Pacman se reafirmó como el mejor libra por libra. Realmente poco puedo agregar respecto a su accionar sobre el ring, pues casi todo está dicho sobre él. Ha sido campeón en seis divisiones diferentes. Reventó al inglés Hatton y al boricua Miguel Cotto durante este año, no les dio tregua en ningún instante; se encuentra en la madurez de su vida profesional y si se arma la pelea con Floyd Mayweather estoy seguro que por fin alguien pondrá en su lugar al ego hecho persona, osea, Pacquiao sí le rompe el hocico a Mayweather.
Tenis
Confieso que el deporte blanco me atrajo hasta este año. Sólo conocía a los tenistas por los mini-resúmenes en los espacios deportivos de la televisión o por los titulares de la prensa escrita, pero este año eso cambió. Me animé a observar los encuentros por completo y no me arrepentí. Esa decisión me permitió observar encuentros memorables de los cuatro grand slam del año -Autralia Open, Roland Garros en Francia, Wimbledon en Inglaterra y el US Open.
Mejor tenista - Roger Federer. El suizo realmente removió mis fibras más sensibles cuando logró su título número 15 de grand slam. En Wimbledon superó la marca impuesta por Pete Sampras, con 14 títulos. Este año además de asegurar su ingreso al salón de la fama, aseguró el ingreso a los corazones de los espectadores. Su performance en la cancha fue mag-ní-fi-co. Roger reivindicó el camino, pues en 2008 no había estado a su máximo nivel. Las lágrimas derramadas en el pasto inglés son la muestra de su grandeza, de su profesionalismo. No son sus fortalezas las que lo hacen tan especial, son sus debilidades las que en verdad hacen la diferencia, pues no las esconde, al contrario, las asume y trabaja para reducirlas. Hay una escena que describe a la perfección porqué es el mejor tenista de la historia: final de US Open. Juan Martín Del Potro era su rival. Todos esperaban una victoria del helvético. No fue así, el argentino logró la hombrada. Roger no salió enojado, no huyó despavorido por la puerta trasera del inmueble, no se fue directo al vestidor, no hizo muecas ni le hizo un desplante a su contrincante, no, fue a abrazarlo, lo reconoció, le aplaudió. En la derrota mostró su lado más humano, sus virtudes se potenciaron aún más que cuando salió victorioso. ¡Gracias Roger!
Automovilismo
Mejor piloto - Jenson Button. El inglés aprovechó el contexto enrarecido y disminuido de la F-1 en este 2009. La máxima categoría mostró una de sus versiones más pobres de toda su existencia. Pocos pilotos lograron la puesta a punto de su auto durante el campeonato. Ferrari y Mc Laren dejaron de dominar, la primera decayó al punto de no entrar en la disputa del campeonato de constructores. Fue una temporada muy desteñida y amarga. Button -de Brawn GP- mostró sus hechuras y cualidades, pero bajo un nivel más competitivo sus posibilidades de ser campeón se habrían reducido drásticamente. 2010 pinta mejor, regresa Schumaher al volante de un Mercedes, Fernando Alonso va a Ferrari, y Hamilton ya fue campeón y siempre será un rival de peligro.
Natación
Roma fue la sede del mundial de la disciplina, en julio pasado. Observar las competencias es muy entretenido, pues no hay mundial u olimpiada en la que se dejen de romper récords.
Hijo de Poseidón - César Cielo. El brasileño se dio a conocer en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, pero fue este año cuando explotó. César llegó al cielo tras despedazar a sus rivales en las albercas de la capital italiana. Se convirtió en el nadador más rápido en el estilo libre al obtener el triunfo en los 50 y 100 metros libres. Es un torpedo dentro de la piscina.
Hijo de Poseidón - César Cielo. El brasileño se dio a conocer en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, pero fue este año cuando explotó. César llegó al cielo tras despedazar a sus rivales en las albercas de la capital italiana. Se convirtió en el nadador más rápido en el estilo libre al obtener el triunfo en los 50 y 100 metros libres. Es un torpedo dentro de la piscina.
Decepción - Michael Phelps. El más grande atleta de todos los tiempos -así lo dicta la opinión pública, la memoria colectiva y sus 14 medallas olímpicas- no refrendó sus epopeyas acuáticas acaecidas en territorio chino, cuando el mundo lo observó erigirse como el rey del Olimpo. Tras haber ganado todo, se tiró a la flojera, dejó de lado las albercas por los clubes nocturnos, las fiestas y los cockteles de ocasión, e incluso se le fotografió fumando marihuana, lo cual demostró que no pasaba por su mejor estado físico y mental. Phelps sigue siendo un joven, como tal tiene inquietudes y tentaciones, por ende no se le debe crucificar por haber fumado marihuana, sin embargo, sí será una mancha en su carrera, un desliz, el negrito en el arroz de su esplendorosa trayectoria.
Mención especial - Paola Espinosa. La oriunda de La Paz, B.C.S., logró una hazaña: vencer a las chinas que tenían años acaparando el primer y segundo puesto del podio. Desde la plataforma romana de 10 metros Paola logró su propósito, ser campeona del mundo. El oro por fin era suyo, por fin era la reina de los clavados. Sus ejecuciones estuvieron muy bonitas. Inició el ciclo olímpico con el pie derecho, es la carta más fuerte de México rumbo a Londres 2012. Por cierto, más que merecido el Premio Nacional del Deporte al cual se hizo acreedora, aunque seguramente estará más conmovida y emocionada por recibir el Danielín de tungsteno, pues cuenta con mayor prestigio y credibilidad, (jaja).
Béisbol
Nunca he sido afecto a este deporte, porque no crecí en un lugar donde se practique, y porque la verdad me parece tedioso, monótono y hasta aburrido. Por supuesto puedo estar equivocado, quizá si hubiera nacido en el norte o el sur del país mi percepción sería distinta, pero por desgracia no es así. A pesar de todo lo anterior, mi profesionalismo está ante todo, respeto y aprecio la diversidad, por ende sí vi muchos resúmenes de grandes ligas de la MLB durante el año -gracias Sports Center, me has salvado-, inclusive hasta me chuté algunos pasajes de la serie mundial y de la final de la liga mexicana de beisbol, donde los Saraperos de Saltillo son los actuales monarcas -derrotaron a los Tigres de Quintana Roo.
Mejor equipo - Boston Red Sox. Una sorpresa más, sí, una más. Se premia la constancia, el esfuerzo, la lucha incesante ante la adversidad, ante el obstáculo imposible, al menos en apariencia. Es verdad, New York Yankees se quedó con el primer lugar del certamen, pero cualquier otro resultado habría sido sinónimo de fracaso, debían hacer algo más que sólo ganar para obtener las palmas del respetable, creo que no lo lograron. A la nómina más alta de toda la MLB se le sumaron los más de 400 mdd de inversión en refuerzos -no crean que muchos, sólo fueron tres. Los mulos del Bronx ganaron la serie mundial, sí, pero es como si en un torneo de futbol estuvieran inscritos Atlante, Auckland City, Al-Alhy, Pohang Steelers, Estudiantes de la Plata y Barcelona -¡ah caray! ¿Eso sí pasó o no'más lo soñé?-, si los blaugranas no ganan de manera fácil y convincente no justificarían la diferencia en calidad y cantidad de recursos -humanos y financieros- respecto de los otros participantes.
Mejor jugador - Adrián González. El mexico-norteamericano pegó más de 40 home run en la temporada regular, fue el segundo en este casillero, sólo detrás de Albert Pujols. La grandeza de su trabajo fue de lo poco rescatable de San Diego Padres, equipo al cual pertenece. Adrián dio la cara, sacó la casta, puso en el mapa a su equipo. A pesar del poco apoyo en el pitcheo, él cumplió en gran manera con su trabajo. Si se llamara Andy Gontz o algo así, seguro ya habría recibido múltiples y millonarias ofertas para cambiar de club, así como reconocimientos a diestra y siniestra. Don't worry Andy, here you got the most prestigious award.
La temporada en este deporte no se compagina con el calendario gregoriano, por lo cual se me dificulta delimitar qué sí y qué no vale para los nombramientos. El premio dice Danielín de tungsteno 2009, así que me atengo a mis propias reglas y tomaré en cuenta los 12 meses.
Mejor equipo - No es Dallas, tampoco es Pittsburgh. San Diego Chargers es mi elegido. Ahí les va mi argumento para que no se esponjen. En la temporada 2008-2009 tuvieron una gran campaña al llegar hasta la final divisional de la conferencia americana, estancia en la cual sucumbieron ante los Steelers (24-35), quienes a la postre ganarían el trofeo Vince Lombardi en el Super Bowl XLIII. Jugaron muy bien aquella noche, sólo que enfrente tenían a la mejor defensa, la temida cortina de acero. En la actual competición tiene marca ganadora (12-3) y es uno de los tres equipos con mejor calidad y solvencia en su juego. Se muestran sólidos rumbo a los playoffs, su suerte dependerá en gran parte al desenvolvimiento de su QB Philipe Rivers, pues suele caerse en los momentos clave. ¿2010 será su año?
MVP - Brett Lorenzo Favre. El legendario número cuatro sigue construyendo una leyenda alrededor de su nombre. A pesar de que se ha retirado como mil veces, el QB de Minnesota Vikings sigue desquebrajando a las defensivas de la NFL con la estupenda puntería de su brazo derecho. Con New York Jets no pudo llegar a la postemporada, sin embargo reservó lo mejor de sí para brindarlo con su actual franquicia. Este año ha buscado vengarse de su ex-equipo, Green Bay Packers, porque en 2008 lo despreciaron -lo querían tener de quarterback sustituto- y le impideron formar parte de su asérrimo rival -Minnesota- motivo por el cual recaló en los Jets durante una temporada. Brett va directo a playoffs y ahí será un oponente temido, un personaje non grato para los otros aspirantes de la conferencia nacional. En la vida como en el deporte, el talento no tiene edad, ¿verdad Favre?
Atletismo
Concluir esta primera edición del Danielín de tungsteno con el atletismo fue una acción premeditada. Lo más polémico y lo más espectacular e impresionante del deporte se dieron justo en esta rama. Se debía cerrar este magnífico evento con broche de oro, el cual viene a continuación.
Insólit@ - La estatuilla es para... Caster Semenya! La mediofondista sudafricana ganó la prueba de 800 metros planos en la rama femenil, hasta ahí, todo era normal. La felicidad le duró poco a la plusmarquista, pues la pasmosa facilidad con la cual dejó atrás a sus rivales y su aspecto físico, poco agraciado, más bien tosco, se transformaron en motivos suficientes para dudar de su sexualidad e impugnar su victoria sobre el tartán de Berlín. Semenya se vio inmersa en el ojo del huracán, todos opinaban sobre si era hombre, mujer o quimera. Poco importó su palabra, hasta su familia se pronunció en contra del maltrato aplicado a Caster. Será en 2010 cuando se obtenga el resultado de la pruba que se le efectuó, lo único seguro son dos cosas: de ser mujer sólo le dirán "lo sentimos" con una sonrisa hipócrita de por medio; y si es hombre u hermafrodita la expulsarán de por vida de toda competencia, no sin antes aplicarle sus respectivos guadañazos en el terreno psicológico, social y económico. Si mintió debe ser castigad@, pero sólo en materia deportiva, sin embargo las burlas y la exposición mediática no le permitirán salir a la calle con tranquilidad, pues en cualquier esquina le señalarán.
Mejor atleta - Usain Bolt. No sólo fue el mejor dentro del atletismo, fue el mejor de todos los atletas existentes sobre la faz de la Tierra. El ser humano más rápido de la historia rompió su propia marca -establecida en la pista del hermoso Nido del Pájaro de Beijing- con un tiempo de 9.58 segundos en la prueba de 100 metros planos, en el marco del mundial de la especialidad realizado en Berlín. Bolt hizo vibrar a millones de personas a través de su larga zancada, su sonrisa sincera, sus poses y festejos, y su desinhibición nunca antes vista. No sólo es qué hizo, sino cómo lo hizo. El cuerpo humano es maravilloso, una máquina perfecta, el jamaiquino es muestra de ello. Momentos como el protagonizado por Usain muestran la esencia del deporte: un hombre tratando de superarse a sí mismo, de divertirse, de descubrir que la unión de un cuerpo y una mente sana no tienen límites.
Hemos finalizado esta primera entrega del Danielín de tungsteno, espero les haya agradado. Ojalá emitan sus comentarios u opiniones sobre las elecciones de los ganadores, el desempeño de los mismos o sobre algún personaje que ustedes consideren obviado por esta redacción. Nos veremos en 2010 si el destino así lo quiere y vuelve a entrelazar nuestros viajes, por lo pronto sean felices.