martes, 29 de diciembre de 2009

El Danielín de tungsteno 2009 (Tercer acto)

Acabó el receso. Alisten sus cámaras y reflectores. La entrega de las estatuillas más glamourosas del orbe está a punto de concluir. Y porque una vez más usted no lo pidió, es turno de reconocer a lo mejor del deporte en general -en esta ocasión hablaré de todo menos futbol, porque no todo es el deporte de las patadas-. Cruyffut piensa en todos y cada uno de sus lectores, aquí no se discrimina a nadie.


Básquetbol

Sólo tomaré en cuenta a la NBA, ¿por qué? Porque las ligas en México son un desastre debido a las pugnas entre personajes de pantalón largo por obtener la mayor parte del pastel, lo cual deja relegado el aspecto deportivo. En Europa hay buen nivel, pero la difusión es escasa -algún video en la red o en canales deportivos de televisión de paga, no más-. En Sudamérica también se sabe que hay buenos equipos y jugadores, pues sus representantes semana a semana muestran su talento en la NBA, pero una vez más la -nula- difusión es el problema.

A la final de este año llegaron Los Ángeles Lakers contra Orlando Magic. Los Ángeles formó un verdadero conjunto, cohesionó sus piezas a la perfección, dejó de ser Kobe Bryant y cuatro más. Pau Gasol jugó de manera sublime, tan es así que hace unos días fue elegido el mejor jugador europeo por La Gazzetta dello Sport. Bynum y Fisher tuvieron la mejor temporada de sus carreras, y Kobe venció a su mayor enemigo, el ego. En la esquina contraria, Orlando no presentaba tanto talento y espectacularidad, pero su trabajo colectivo y el virtuosismo de su estrella, Dwight Howard -también conocido como Superman-, los llevaron a ganar el título de la Conferencia Este, aunque en la final no opusieron mayor resistencia al perder cuatro partidos contra uno. Ambos equipos -Lakers y Magic- eclipsaron la campaña de escuadras como Cleveland Cavs, con todo y el nuevo rey de la duela, LeBron James; y Boston Celtics con el mejor quinteto titular, liderado por el cuervo Kevin Garnett.

Bajo el panorama descrito, el premio al mejor jugador es para: Pau Gasol. El español le mostró al mundo porqué es el líder de la selección subcampeona en los JJOO 2008. Con el jersey de los Lakers Pau atascó el balón cuando quiso y como quiso, no es el típico centro que sólo sabe encestar bajo el aro. Alienta a sus compañeros, da órdenes, corre, defiende, es el mejor en su posición, porque no sólo se hace cargo de las responsabilidades de la misma, además le brinda un plus al equipo.

Mejor equipo - Sí hay lugar a dudas, pero como bien dice Eduardo Galeano, "la mayor certeza es la que desayuna dudas todas las mañanas", así que a quien le sea otorgado el reconocimiento debe saber que hubo otros que estuvieron a su altura. El ganador es... Boston Celtics. No enloquecí y no soy contreras. Las lesiones mermaron su accionar, pero de haber gozado de plena salud, mínimo hubieran llegado a la final contra Lakers. La calidad de su juego fue altísima, un verdadero deleite para la pupila.

Jugador espectáculo - LeBron James. Nunca olvida a los miles de espectadores que pagan un boleto para entrar a la Arena, y por supuesto, tampoco desdeña a los tele-espectadores, juega para ganarse los aplausos de todos ellos. Disfruta lo que hace, farolea, se sabe observado en todo instante y eso no lo presiona, al contrario, lo motiva para dar lo mejor de sí. Este cuate sí está muy lebrón.


Equipo sorpresa - Oklahoma City. El Thunder sorprendió a propios y extraños en su año de debut. Sí. Fue tan malo que provocó una enorme sorpresa. Una verdadera infamia la temporada de estos muchachos, una lágrima. Un dato: fuentes extra-oficiales de la ciudad de Oklahoma revelaron que la tribu urbana denominada como los emos, registró un 300% en el incremento de sus simpatizantes y afiliados. Se sospecha que los jóvenes decepcionados por el Thunder sean quienes engrosaron las filas de los emos.

Boxeo

El pugilismo está a la expectativa de mis palabras, así que no lo hagamos esperar.

Mejor boxeador - Manny Pacquiao. El Pacman se reafirmó como el mejor libra por libra. Realmente poco puedo agregar respecto a su accionar sobre el ring, pues casi todo está dicho sobre él. Ha sido campeón en seis divisiones diferentes. Reventó al inglés Hatton y al boricua Miguel Cotto durante este año, no les dio tregua en ningún instante; se encuentra en la madurez de su vida profesional y si se arma la pelea con Floyd Mayweather estoy seguro que por fin alguien pondrá en su lugar al ego hecho persona, osea, Pacquiao sí le rompe el hocico a Mayweather.

Tenis


Confieso que el deporte blanco me atrajo hasta este año. Sólo conocía a los tenistas por los mini-resúmenes en los espacios deportivos de la televisión o por los titulares de la prensa escrita, pero este año eso cambió. Me animé a observar los encuentros por completo y no me arrepentí. Esa decisión me permitió observar encuentros memorables de los cuatro grand slam del año -Autralia Open, Roland Garros en Francia, Wimbledon en Inglaterra y el US Open.


Mejor tenista - Roger Federer. El suizo realmente removió mis fibras más sensibles cuando logró su título número 15 de grand slam. En Wimbledon superó la marca impuesta por Pete Sampras, con 14 títulos. Este año además de asegurar su ingreso al salón de la fama, aseguró el ingreso a los corazones de los espectadores. Su performance en la cancha fue mag-ní-fi-co. Roger reivindicó el camino, pues en 2008 no había estado a su máximo nivel. Las lágrimas derramadas en el pasto inglés son la muestra de su grandeza, de su profesionalismo. No son sus fortalezas las que lo hacen tan especial, son sus debilidades las que en verdad hacen la diferencia, pues no las esconde, al contrario, las asume y trabaja para reducirlas. Hay una escena que describe a la perfección porqué es el mejor tenista de la historia: final de US Open. Juan Martín Del Potro era su rival. Todos esperaban una victoria del helvético. No fue así, el argentino logró la hombrada. Roger no salió enojado, no huyó despavorido por la puerta trasera del inmueble, no se fue directo al vestidor, no hizo muecas ni le hizo un desplante a su contrincante, no, fue a abrazarlo, lo reconoció, le aplaudió. En la derrota mostró su lado más humano, sus virtudes se potenciaron aún más que cuando salió victorioso. ¡Gracias Roger!

Automovilismo

Mejor piloto - Jenson Button. El inglés aprovechó el contexto enrarecido y disminuido de la F-1 en este 2009. La máxima categoría mostró una de sus versiones más pobres de toda su existencia. Pocos pilotos lograron la puesta a punto de su auto durante el campeonato. Ferrari y Mc Laren dejaron de dominar, la primera decayó al punto de no entrar en la disputa del campeonato de constructores. Fue una temporada muy desteñida y amarga. Button -de Brawn GP- mostró sus hechuras y cualidades, pero bajo un nivel más competitivo sus posibilidades de ser campeón se habrían reducido drásticamente. 2010 pinta mejor, regresa Schumaher al volante de un Mercedes, Fernando Alonso va a Ferrari, y Hamilton ya fue campeón y siempre será un rival de peligro.

Natación


Roma fue la sede del mundial de la disciplina, en julio pasado. Observar las competencias es muy entretenido, pues no hay mundial u olimpiada en la que se dejen de romper récords.

Hijo de Poseidón - César Cielo. El brasileño se dio a conocer en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, pero fue este año cuando explotó. César llegó al cielo tras despedazar a sus rivales en las albercas de la capital italiana. Se convirtió en el nadador más rápido en el estilo libre al obtener el triunfo en los 50 y 100 metros libres. Es un torpedo dentro de la piscina.

Decepción - Michael Phelps. El más grande atleta de todos los tiempos -así lo dicta la opinión pública, la memoria colectiva y sus 14 medallas olímpicas- no refrendó sus epopeyas acuáticas acaecidas en territorio chino, cuando el mundo lo observó erigirse como el rey del Olimpo. Tras haber ganado todo, se tiró a la flojera, dejó de lado las albercas por los clubes nocturnos, las fiestas y los cockteles de ocasión, e incluso se le fotografió fumando marihuana, lo cual demostró que no pasaba por su mejor estado físico y mental. Phelps sigue siendo un joven, como tal tiene inquietudes y tentaciones, por ende no se le debe crucificar por haber fumado marihuana, sin embargo, sí será una mancha en su carrera, un desliz, el negrito en el arroz de su esplendorosa trayectoria.


Mención especial - Paola Espinosa. La oriunda de La Paz, B.C.S., logró una hazaña: vencer a las chinas que tenían años acaparando el primer y segundo puesto del podio. Desde la plataforma romana de 10 metros Paola logró su propósito, ser campeona del mundo. El oro por fin era suyo, por fin era la reina de los clavados. Sus ejecuciones estuvieron muy bonitas. Inició el ciclo olímpico con el pie derecho, es la carta más fuerte de México rumbo a Londres 2012. Por cierto, más que merecido el Premio Nacional del Deporte al cual se hizo acreedora, aunque seguramente estará más conmovida y emocionada por recibir el Danielín de tungsteno, pues cuenta con mayor prestigio y credibilidad, (jaja).

Béisbol

Nunca he sido afecto a este deporte, porque no crecí en un lugar donde se practique, y porque la verdad me parece tedioso, monótono y hasta aburrido. Por supuesto puedo estar equivocado, quizá si hubiera nacido en el norte o el sur del país mi percepción sería distinta, pero por desgracia no es así. A pesar de todo lo anterior, mi profesionalismo está ante todo, respeto y aprecio la diversidad, por ende sí vi muchos resúmenes de grandes ligas de la MLB durante el año -gracias Sports Center, me has salvado-, inclusive hasta me chuté algunos pasajes de la serie mundial y de la final de la liga mexicana de beisbol, donde los Saraperos de Saltillo son los actuales monarcas -derrotaron a los Tigres de Quintana Roo.

Mejor equipo - Boston Red Sox. Una sorpresa más, sí, una más. Se premia la constancia, el esfuerzo, la lucha incesante ante la adversidad, ante el obstáculo imposible, al menos en apariencia. Es verdad, New York Yankees se quedó con el primer lugar del certamen, pero cualquier otro resultado habría sido sinónimo de fracaso, debían hacer algo más que sólo ganar para obtener las palmas del respetable, creo que no lo lograron. A la nómina más alta de toda la MLB se le sumaron los más de 400 mdd de inversión en refuerzos -no crean que muchos, sólo fueron tres. Los mulos del Bronx ganaron la serie mundial, sí, pero es como si en un torneo de futbol estuvieran inscritos Atlante, Auckland City, Al-Alhy, Pohang Steelers, Estudiantes de la Plata y Barcelona -¡ah caray! ¿Eso sí pasó o no'más lo soñé?-, si los blaugranas no ganan de manera fácil y convincente no justificarían la diferencia en calidad y cantidad de recursos -humanos y financieros- respecto de los otros participantes.

Mejor jugador - Adrián González. El mexico-norteamericano pegó más de 40 home run en la temporada regular, fue el segundo en este casillero, sólo detrás de Albert Pujols. La grandeza de su trabajo fue de lo poco rescatable de San Diego Padres, equipo al cual pertenece. Adrián dio la cara, sacó la casta, puso en el mapa a su equipo. A pesar del poco apoyo en el pitcheo, él cumplió en gran manera con su trabajo. Si se llamara Andy Gontz o algo así, seguro ya habría recibido múltiples y millonarias ofertas para cambiar de club, así como reconocimientos a diestra y siniestra. Don't worry Andy, here you got the most prestigious award.

Futbol Americano

La temporada en este deporte no se compagina con el calendario gregoriano, por lo cual se me dificulta delimitar qué sí y qué no vale para los nombramientos. El premio dice Danielín de tungsteno 2009, así que me atengo a mis propias reglas y tomaré en cuenta los 12 meses.

Mejor equipo - No es Dallas, tampoco es Pittsburgh. San Diego Chargers es mi elegido. Ahí les va mi argumento para que no se esponjen. En la temporada 2008-2009 tuvieron una gran campaña al llegar hasta la final divisional de la conferencia americana, estancia en la cual sucumbieron ante los Steelers (24-35), quienes a la postre ganarían el trofeo Vince Lombardi en el Super Bowl XLIII. Jugaron muy bien aquella noche, sólo que enfrente tenían a la mejor defensa, la temida cortina de acero. En la actual competición tiene marca ganadora (12-3) y es uno de los tres equipos con mejor calidad y solvencia en su juego. Se muestran sólidos rumbo a los playoffs, su suerte dependerá en gran parte al desenvolvimiento de su QB Philipe Rivers, pues suele caerse en los momentos clave. ¿2010 será su año?

MVP - Brett Lorenzo Favre. El legendario número cuatro sigue construyendo una leyenda alrededor de su nombre. A pesar de que se ha retirado como mil veces, el QB de Minnesota Vikings sigue desquebrajando a las defensivas de la NFL con la estupenda puntería de su brazo derecho. Con New York Jets no pudo llegar a la postemporada, sin embargo reservó lo mejor de sí para brindarlo con su actual franquicia. Este año ha buscado vengarse de su ex-equipo, Green Bay Packers, porque en 2008 lo despreciaron -lo querían tener de quarterback sustituto- y le impideron formar parte de su asérrimo rival -Minnesota- motivo por el cual recaló en los Jets durante una temporada. Brett va directo a playoffs y ahí será un oponente temido, un personaje non grato para los otros aspirantes de la conferencia nacional. En la vida como en el deporte, el talento no tiene edad, ¿verdad Favre?

Atletismo

Concluir esta primera edición del Danielín de tungsteno con el atletismo fue una acción premeditada. Lo más polémico y lo más espectacular e impresionante del deporte se dieron justo en esta rama. Se debía cerrar este magnífico evento con broche de oro, el cual viene a continuación.

Insólit@ - La estatuilla es para... Caster Semenya! La mediofondista sudafricana ganó la prueba de 800 metros planos en la rama femenil, hasta ahí, todo era normal. La felicidad le duró poco a la plusmarquista, pues la pasmosa facilidad con la cual dejó atrás a sus rivales y su aspecto físico, poco agraciado, más bien tosco, se transformaron en motivos suficientes para dudar de su sexualidad e impugnar su victoria sobre el tartán de Berlín. Semenya se vio inmersa en el ojo del huracán, todos opinaban sobre si era hombre, mujer o quimera. Poco importó su palabra, hasta su familia se pronunció en contra del maltrato aplicado a Caster. Será en 2010 cuando se obtenga el resultado de la pruba que se le efectuó, lo único seguro son dos cosas: de ser mujer sólo le dirán "lo sentimos" con una sonrisa hipócrita de por medio; y si es hombre u hermafrodita la expulsarán de por vida de toda competencia, no sin antes aplicarle sus respectivos guadañazos en el terreno psicológico, social y económico. Si mintió debe ser castigad@, pero sólo en materia deportiva, sin embargo las burlas y la exposición mediática no le permitirán salir a la calle con tranquilidad, pues en cualquier esquina le señalarán.

Mejor atleta - Usain Bolt. No sólo fue el mejor dentro del atletismo, fue el mejor de todos los atletas existentes sobre la faz de la Tierra. El ser humano más rápido de la historia rompió su propia marca -establecida en la pista del hermoso Nido del Pájaro de Beijing- con un tiempo de 9.58 segundos en la prueba de 100 metros planos, en el marco del mundial de la especialidad realizado en Berlín. Bolt hizo vibrar a millones de personas a través de su larga zancada, su sonrisa sincera, sus poses y festejos, y su desinhibición nunca antes vista. No sólo es qué hizo, sino cómo lo hizo. El cuerpo humano es maravilloso, una máquina perfecta, el jamaiquino es muestra de ello. Momentos como el protagonizado por Usain muestran la esencia del deporte: un hombre tratando de superarse a sí mismo, de divertirse, de descubrir que la unión de un cuerpo y una mente sana no tienen límites.

Hemos finalizado esta primera entrega del Danielín de tungsteno, espero les haya agradado. Ojalá emitan sus comentarios u opiniones sobre las elecciones de los ganadores, el desempeño de los mismos o sobre algún personaje que ustedes consideren obviado por esta redacción. Nos veremos en 2010 si el destino así lo quiere y vuelve a entrelazar nuestros viajes, por lo pronto sean felices.

domingo, 27 de diciembre de 2009

El Danielín de tungsteno 2009 (Segundo acto)

Regresemos a la realidad. Afortunada o desafortunadamente -y parafraseando a Cristina Pacheco- aquí nos tocó vivir, por ende vamos a entregar nuestras hermosas y prestigiadas estatuillas a lo mejor del futbol mexicano durante los últimos 12 meses. Tercera llamada, ¡comenzamos!

Mejor equipo - Y sí, como es costumbre, una sorpresa más -en este blog no apto para cardiacos-, el premio se va hasta... ¡Puebla! Los chelís-boys fueron de los pocos equipos regulares tanto en el Clausura como en el Apertura. Toluca y Monterrey también le echaron ganitas este año pero no rifaron tanto como los de la franja. Puebla es un club de tradición y arraigo dentro del futbol mexicano, tiene una rica y extensa historia, además pertenece a una de las ciudades más importantes del país. Sin embargo, en esta década sólo había arrastrado la cobija, a tal grado de descender en dos ocasiones. Por tales motivos era impensable que este año tuvieran buenos resultados. Con un plantel reducido, retazos de otros equipos, incluso, jugadores retirados que ya hasta músicos de banda y duranguense eran -¿verdad, Daniel Osorno?-, el Puebla tenía el camino cuesta arriba para quedarse en primera y, por supuesto, para calificar a la liguilla. No obstante, en el futbol como en la vida nada está escrito. Chelís les inyectó ánimo, los hizo disfrutar de cada entrenamiento, de cada partido, de cada minuto. Su trabajo no es nuevo, lo inició hace más de tres años en la extinta Primera A. Puebla demostró que son los hombres quienes juegan, no los nombres. Peleó cada partido hasta el final. No era el que mejor jugaba, porque sus limitaciones se lo impedían, pero sí era el más guerrero, el de más pundonor, el de mayor entrega, el que más hambre demostraba, el que mayor gozo denotaba al jugar.

Puebla no fue campeón en ningún torneo. En el Clausura cayó en semifinales ante Pumas, en un triunfo agónico y de alarido para los universitarios. En el Apertura cayó ante el arbitraje. ¡Ah no! ¡Ups! Teclas digitadas erróneamente. Quería decir que sucumbió ante el Cruz Azul. Ahora irá en pos del afamado y prestigiado Interliga 2010, para obtener un boleto rumbo a la Copa Libertadores 2010. ¡Vamos Puebla! ¡A conquistar corazones en Sudamérica!

Mejor jugador - Es difícil determinar al mejor por dos razones. La primera es porque el campeonato no ofrece demasiada variedad, ni hay tanto talento como los pupilos de Azcárraga nos quieren hacer ver; y la segunda es porque la verdad no recuerdo muy bien lo que pasó durante el primer trimestre de 2009. Y el Danielín de tungsteno más codiciado es para... Humberto Suazo. El andino demostró porque Monterrey pagó 5 mdd por él al Colo Colo. Tras 6 meses de pachanga y apatía, Chupete se puso las pilas, dejó de lado el individualismo y puso su talento al servicio del equipo. Por fin se mostró como el matón que es cuando viaja a ser parte de la escuadra de Marcelo Bielsa. Suazo es el futbolista más completo de la liga, aunque no debería sorprender que si va a Europa no brille como lo hacía aquí, pues allá la marca y la exigencia física son más exigentes. En el viejo continente no lo marcarán Melvin Brown ni El Topo Valenzuela.

Once ideal - Hay tantos futbolistas de gran nivel como para hacer 10 equipos ideales. Por falta de espacio sólo daré a conocer uno. Ni modo, Pikolín y compañía, si vuelven a nacer chance y entran en la lista.

Portero: ¿No podría omitir esta categoría? La verdad ninguno me convenció al 100 %. No me puedo quedar el premio, así que el ganador es... Federico Vilar. El casaca número tres de los Potros de hierro del Atlante fue regular en todas sus actuaciones. De hecho logró ganarse un llamado en la selección albiceleste de Diego Maradona; es posible que de haber jugado en un equipo más conocido, y en una mejor liga, hubiera obtenido la titularidad.

Defensas: El lateral derecho sin duda es para Rogelio Chávez. El jugador celeste es muy aplicado en la marca, es difícil de pasar, veloz, se incorpora con eficiencia al ataque, y sus pases son peligrosos y bien realizados. Su aporte fue muy valioso para el juego de su equipo; la banda derecha se mantuvo segura en defensa, y peligrosa y con profundidad al ataque. Duilio Davino agarró su decimonoveno aire, el excentral americanista llegó a Monterrey tras su paso por el Puebla -lugar al cual había desembarcado luego de su estadía en la MLS con el FC Dallas- y calló bocas -incluida la mía-. Demostró que la experiencia, la ubicación y la coordinación con la línea defensiva son grandes antídotos contra la falta de velocidad. Duilio formó la central más sólida del torneo junto con Basanta. Mauricio Romero, de Morelia, demostró que hoy día es el mejor central de la liga mexicana. No sólo es una barrera humana, además tiene un excelente manejo del juego aéreo, es una garantía en el fondo, es más, deberían llevarlo a la selección argentina en lugar del lerdo de Demichelis. Manuel De la Torre, de Toluca. A lo mejor alguno de ustedes ni siquiera lo recuerda, o han de decir que "ni en su casa lo conocen", pero el lateral de los diablos es muy regular, cumple su tarea, va y viene, es la bandita en esa banda izquierda.

Mediocampistas: Sinha. El naturalizado mexicano es un genio, cuida y quiere al balón, en cada trazo, en cada finta y en cada disparo demuestra lo equivocado que está Javier Aguirre al no convocarlo a la selección. Sinha es el mejor mediapunta del futbol mexicano, incluso se la rifa en la recuperación del balón. Jaime Lozano. El Jimmy regresó al nivel mostrado con el Pumas bicampeón. Le regresó la alegría por jugar. Los jugadores son seres humanos, comunes y corrientes, el estado anímico-mental afecta su rendimiento en el terreno de juego -para bien o para mal-, y justo este año se casó, lo cual pudo haberlo motivado sobremanera, así como su ilusión por regresar al tri. Fue co-participe del liderato de goleo de Emanuel Villa. Es el mejor pasador de la actualidad en México. Christian Giménez, el Chaco continuó en plan ascendente. También logró ser convocado a la albiceleste, pero una lesión le impidió volver a ser llamado y mejorar el rendimiento del Pachuca. Su gran calidad ha llegado al Cruz Azul, donde se espera siga afianzándose como uno de los tres mejores extranjeros de la liga -y aporte para la consecución del ansiado título. Walter Ayoví. El ecuatoriano llegó sin bombo ni platillo, ningún experto lo consideró como un refuerzo interesante o importante, de hecho, no recuerdo haberlo escuchado más de tres ocasiones. En fin, se dedicó a mostrar su talento, puso al servicio del equipo su gran disparo de larga distancia y su magnífico toque de balón. Monterrey no sólo fue Suazo y De Nigris, Ayoví es la prueba de ello.

Delanteros: Aunque los americanistas se sientan por la exclusión de su ídolo -Salvador Cabañas-, es casi obvio quiénes serán los ganadores en este rubro. Humberto Suazo. Líneas antes ya explicamos el porqué de su nombramiento como el mejor jugador, y por supuesto, debía ser incluido en la delantera ideal. Hasta ayudó a elevar el nivel de sus compañeros -como Aldo De Nigris-. Emanuel Villa. La mejor contratación del Apertura 2009, ni más ni menos. Ni Solari ni Montenegro. Tito regresó a México después de probar suerte en Inglaterra -con el Derby County- en donde en lo personal le fue relativamente bien, aunque colectivamente no fue así, pues su equipo descendió. En su paso por Atlas y Tecos ya había evidenciado su poderío como delantero, sin embargo regresó con mayor potencia y fuerza física, demostró estar por encima de sus compañeros y de sus marcadores. 17 goles en temporada regular. Hubo una jugada que para mí es la viva muestra de su poder, tanto físico como mental, en el Cruz Azul - América (2-3) en el Estadio Azul, colocó el empate momentáneo en una jugada donde peleó el balón, lo ganó al sacar de balance a Aquivaldo Mosquera -un muchachito un poquito trabado, no'más poquito- mediante un cuerpo a cuerpo, y batió al súper porterazo Memo Ochoa.

Y mientras Daniel redactaba los párrafos anteriores, Jaime pensó en otras categorías para el Danielín de tungsteno, así que aquí van...

Mejor árbitro - (Sonidos de grillo)

Mejor aguador - Kikín Fonseca. El ídolo de multitudes fue en caída libre en sólo tres años. Del Benfica de Portugal cayó a la banca de los mininos, o Tigres, como eran conocidos en sus buenos tiempos -¿algún día tuvieron buenos tiempos?


Mejor Director Técnico - ¡El Chelís! ¿Por qué? ¡Uy! ¡Por qué no! Chelís tomó unos ladrillos sin brillo y construyó una mansión. La hizo de tesorero, de contador, de administrador, hasta de psicólogo, una versatilidad impresionante de este señorón. Impuso la chelís-manía, todos pelones y chillones, ¡amén!

Mejor partido del año - Real Madrid - Barcelona (2-6) en el Bernabéu... es que en México sí hubo divertidos, pero así como súper padres y bien jugados, como que no. ¿O tienen alguna opción?

MENCIONES ESPECIALES
Petardo del año - Joziel Da Rocha. No los culpo si ni lo conocen, en verdad es de lo peor que he visto, pero su promotor debe ser el mejor del mundo.

Mejor afición - La de Cruz Azul y la del Atlas. Cada torneo demuestran que la paciencia es una virtud.
Así terminamos este segundo acto, mañana la siguiente entrega, y última, de los óscares del deporte. El tercer acto será del deporte en general, así que no te lo pierdas, va a estar re divertido. Continuará...

jueves, 24 de diciembre de 2009

El Danielín de tungsteno 2009 (Primer acto)

¡Heme aquí! Con bubu lubu en mano (y no es comercial) y luego de un arduo trabajo en la preparación de la cena de hoy, da inicio el recuento más (in)esperado por todos ustedes,  donde premiaré a lo más notable del deporte mundial durante 2009. Para elegir a los ganadores se ha hecho un ejercicio demócratico y consciensudo en mi redacción (Jaime y Daniel no se ponían de acuerdo). Y con ustedes el Danielín de tungsteno.

Futbol

Internacional

Mejor Equipo - Barcelona. Si quieren una pequeña explicación lean el post anterior.

Mejor Selección Nacional - Brasil. España estuvo a punto de arrebatarle la presea, pero su excesiva confianza ante EEUU en la semifinal de la Copa Confederaciones, donde cayeron 0-2, demostró que no son perfectos y que su más grande rival son ellos mismos. Por el contrario, Brasil recompuso el camino en la final de ese torneo: al caer 0-2 ante los gringos se despojaron de la apatía y la egolatría para jugar como sólo ellos saben. El marcador final fue 3-2. Además, Brasil quedó en primer lugar de la eliminatoria sudamericana, delante de las deslumbrantes Chile y Paraguay. Cuando Dunga le quita el freno de mano al scratch, mete miedo a cualquiera: golean, ridiculizan y pasan por encima; ni los Tejones de Tejupilco apantallan tanto.

Mejor jugador - Y he aquí la primera sorpresa de la noche. El ganador es... Xavi Hernández. El centrocampista catalán no sólo es el cerebro creativo del Barca, también lo es de la selección. Messi hizo más goles que él, brilló más, dribló más, sin embargo con Argentina fue un fiasco total y absoluto. En la albiceleste se demostró que no basta con Messi, es necesario contar con tipos con el talento y la inteligencia de Xavi, capaces de recuperar y distribuir el balón de forma excelsa. Xavi es el mejor, no hay más; con España y con Barcelona lo demostró. No vende tantas camisetas, no es mediático y no necesita tener el 10 estampado en la espalda para jugar como tal.

El Once ideal - Desgraciadamente la mesa de trabajo de Cruyffut es un poco distraída, lo cual ocasionó la pérdida de la lista de jugadores de la Concacharcos, África, Oceanía, Asia y la Antártida, quienes estarían en el once ideal. Por lo tanto nos vimos en la penosa necesidad de incluir diez jugadores europeos y uno sudamericano. Ni modo, sé que el nivel no es el mismo, pero algo es algo.

Portero: Julio César. El cancerbero del Inter fue pieza clave para la consecución del tercer scudetti. No logró evitar la caída de la escuadra en Champions mas evitó una hecatombe mayor. Además se hizo de la titularidad en la selección brasileña.

Defensas: (en línea de cuatro, iniciando por el lateral derecho) Daniel Alves. Es una muestra más de los excelentes laterales surgidos en Brasil. Ataca más de lo que defiende, es veloz, técnico y con gran potencia física. Por la banda derecha formó una alianza demoledora con Messi. Fue pieza clave para el hexacampeón culé. Nemandja Vidic. El serbio es un roble, una garantía en el fondo de los red devils, con quienes ganó la Premier y la Carling Cup. Clasificó al mundial con su selección y fue el líder de la sólida defensa. Piqué. Regresó a Cataluña con mayor experiencia, oficio y eficacia en la marca, luego de su paso por el Manchester United. Fue una muralla, simplemente soberbio a la hora de marcar. De calle el mejor central durante 2009. Patrice Evra. Se consolidó en la Premier; el ex hombre del Mónaco encajó perfecto en el cuadro de Sir Alex Ferguson. Es un lateral izquierdo de verdad, no payasadas como Layún o algún otro piedra que anda por ahí.

Mediocampistas: (Había filtrado a Gerrard aquí, no obstante mi redactor se percató de que influyó mi enorme afinidad con el Liverpool y lo ha descalificado. Ay pa' la otra, Stevie). Xabi Alonso. El exjugador del Liverpool fichó por los merengues precisamente por su gran actuación con los reds. Además fue notable su accionar con la selección española. Xavi Hernández. El mejor jugador debía estar en la alineación, ya les platiqué el porqué. Andrés Iniesta. Un muchacho con físico inversamente proporcional a su talento: frágil de cuerpo, no así de corazón. Cuando tiene salud es el mejor en su posición, un genio en movimiento. Juan Sebastián Verón. Antes de que me linchen, daré mis razones para efectuar tal nombramiento. La Brujita regresó hace dos años a jugar a Argentina, con Estudiantes de la Plata. Como a casi todos los veteranos que regresan a su país, no se le auguraba gran éxito. ¡Oh sorpresa! Se convirtió en el capitán, en la insignia del equipo. Ganó un título de liga y el trofeo de la edición 50 de la Copa Libertadores. Es el entrenador dentro del campo, tomó su segundo aire y regresó a la selección argentina; es todo un crack. Ahora sí, mátenme a gusto.

Delanteros: Messi. Si no se lo doy se iban a enojar. Sus 42 goles en la temporada y el talento desparramado por Europa no me dejan más remedio que darle chance sólo por esta vez. Fernando TorresThe kid, como se le conoce en Inglaterra, la rompió con el Liverpool. Dio la cara por los reds, fue goleador de la Premier y goleador con la Furia Roja. Potenció sus virtudes en la tierra de los Beatles, dejó de ser el delantero mimado que solía ser en el Atlético de Madrid. Es en este momento es el mejor delantero del mundo.


Queridos lectores, debo partir... el pavo, los bolillos y demás. Por tal motivo dividiremos esta entrega de premios en tres actos. Esta fue del futbol internacional, la siguiente será del futbol mexicano y la última -no por ello menos importante- del deporte en general (tenis, basquetbol, futbol americano, natación, hadball, tocho bandera, canicas, trompo, chinchampú y todo lo que se me ocurra). Saludos noche-buenos.

martes, 22 de diciembre de 2009

El Reinado Culé

Nadie en su sano juicio puede negar que Barcelona fue el mejor equipo durante este año. Con seis títulos en un año, ¿quién se atreve a decir que no fue el mejor? Quien osara a negarlo tendría que ser trasladado de inmediato al oftalmólogo, y si la visita resulta infructuosa, no se descarte al psicólogo. Sin embargo, no es la cantidad de títulos obtenidos, que es de por sí histórica, la que lo hace acreedor a dicha distinción. La mayor virtud para congratularlo está fincada en la portentosa calidad del futbol desplegado.

La revolución del imperio blaugrana comenzó en el verano de 1988, cuando Johan Cruyff asumió el timón del equipo. Retornó a casa, a la ciudad condal, de la cual se había enamorado 15 años atrás. A partir de ese momento forjó un gran grupo, dentro y fuera del terreno de juego, retomó el Futbol Total (del cual fue protagonista y estandarte mientras jugó con la Naranja Mécanica, con quienes fue subcampeón del mundo en 1974), lo innovó y trasladó al Barca, creando así al mítico Dream Team, que entre sus filas tenía a jugadores como Guardiola, Koeman, Romario, Bakero y Stoichkov.

El Dream Team deslumbró al planeta entero con su talento, inteligencia y destreza mostrada en cada uno de sus juegos. Cuatro títulos consecutivos de La Liga, además de la UEFA Champions League de 1992, en Wembley, ante la Sampdoria de Italia, fueron los frutos cosechados a partir de una semilla con grandes nutrientes sembrada justo en las entrañas de la institución. No obstante, al Barcelona aún le faltaba mucho por hacer para llegar a la cima, para ser autónomo y soberano, para ser el rey. La dimisión de Johan del banquillo del Camp Nou, en 1996, fue el punto más álgido para la institución, fue un hecho que rompió la armonía entre directiva, jugadores y socios, los hundió en un pasaje sombrío, aunque a la postre fue bien encauzado, pues se utilizó para replantear objetivos, para regresar a las bases del método vanguardista y excelso del cruyffismo. Para jugar al futbol con elegancia, prestancia, amor y pasión. Para volver a divertirse y revivir el amor con la gordinha.

El tercer milenio entró a escena. Barcelona seguía reestructurándose, pero como era de esperarse, fracasó en su intento por terminar la obra inaugurada y cimentada por Cruyff, pues hizo caso omiso a los preceptos de éste. El año 2003 fue el punto de inflexión para los blaugranas: Joan Laporta se convirtió en Presidente. De nuevo dio mayor importancia y oportunidad a la cantera, consolidó a jugadores como Xavi, Puyol, Valdés e Iniesta, reforzó al equipo con jugadores importantes como Eto'o y Ronaldinho, despreciados por Florentino Pérez -ya que no vendían camisetas como sus galácticos-. Además, le dio la oportunidad a Frank Rijkaard, técnico holandés, gran táctico e inteligente, con buen manejo de grupo, autoridad y osadía. Las piezas del rompecabezas estaban completas, sólo faltaba unirlas a través del entrenamiento, el esfuerzo, la creatividad, el compromiso y la diversión. Y así lo hicieron, no desperdiciaron la oportunidad. París los vio encumbrarse en 2006: la orejona fue suya por segunda ocasión en la historia. Ahí estaba el Barça, el gigante había despertado e iba viento en popa rumbo a la tierra prometida.

Tanto 2007 como 2008 no fueron como se esperaban. El equipo jugó bien pero le faltó un plus. El momento para erigirse como una dinastía debía esperar. Quizá les faltó hambre y compromiso. Tal vez no se esforzaron como el primer día. Aunque los ingredientes estaban puestos sobre la mesa, algunos de ellos ya no querían pertenecer a ese platillo. La armonía estuvo en riesgo y el Madrid aprovechó para ganar dos ligas consecutivas a base de riñones: no jugaban mejor que los catalanes pero sí eran más efectivos, tanto con la chequera como en el campo. En pleno verano de 2008 se tomó una decisión sana: Rijkaard dejó de ser el Director Técnico. La baraja de candidatos al banquillo se fue acortando, tanto por diferencias en el terreno económico con los aspirantes, como por los compromisos asumidos con anterioridad por estos en otras entidades deportivas.

Laporta tomó la decisión más importante de todo su mandato: subió a Josep Guardiola del Barcelona B al primer equipo; debutaría en las grandes ligas. Ese mismo Pep Guardiola que pasó sus últimos seis meses como jugador en México, sí, en México, con los Dorados de Culiacán, donde la hizo más de auxiliar técnico de Juan Manuel Lillo que de jugador. Aportaba más de lo que parecía, su mente hacía lo que sus piernas ya no podían. Pep no parecía el indicado para el banquillo, porque más allá de que fue un símbolo durante 15 años, marcó una época y fue un referente, no tenía experiencia en primera división y el ambiente que se vivía tras la salida de Frank era hostil y turbulento. El reto era muy grande, el equipo estaba disminuido, había perdido confianza en sí mismo. Guardiola merecía llegar a ese puesto pero el contexto parecía no ser el idóneo.


Es-Pep-tacular
(Fernando Palomo dixit). Un empate y una derrota en sus primeros dos encuentros oficiales hicieron pensar que había sido un error su contratación. ¿Y después? Barcelona aceleró a medida que la temporada entró en tiempos de definición. Jugó con los rivales: ganó, gustó y goleó. En medio de la adversidad mostró su verdadero potencial, su raza, su estirpe. En La Liga le dio una lección de vida al Real Madrid en el Santiago Bernabéu, un 6-2 que fue más allá de los números: la alegría demostró que siempre vencerá a la apatía, aun cuando ésta última ocasionalmente haga creer lo contrario a través de un medidor o marcador. La serie con el Chelsea es otro botón de muestra: ganó el que jugó futbol, no el que se colgó del travesaño con sus 11 jugadores durante 180 minutos. Tarde o temprano el destino premia a quienes se atreven a vivir con intensidad, a quienes no se guardan algo, a quienes dan todo de sí. El gol de Iniesta, en tiempo de compensación, derrumbó a Stamford Bridge y demostró la gallardía culé. En Roma sólo hubo un equipo. Messi y Eto'o mostraron su potencial. El Manchester United parecía un equipo chico y desalmado, así lo hizo ver la escuadra dirigida por Pep.

La Copa del Rey la ganaron sin mayores sobresaltos. El triplete se había dado y Laporta no se había equivocado. En su primera temporada, Guardiola deslumbró. ¿Podía ganar algo más? ¡Sí! Llevó a sus vitrinas la Recopa Europea y la Recopa de España. Messi, Piqué, Busquets, Pedrito y Bojan se sumaron a los canteranos antes mecionados, demostrando que se necesita algo más que una chequera millonaria (Madrid) o llena de petro-dólares (Chelsea y Manchester City) para conformar un cuadro que esté listo para ganar, convencer y alegrar. Eto'o, Henry, Touré y Alves potenciaron sobremanera al grupo formado por los canteranos. Más allá de que Messi fue galardonado con todos los premios habidos y por haber, no puede considerársele como el único artífice de esta hazaña. Xavi e Iniesta son los motores, los cerebros del equipo; pese a que no ganaron ningún premio físico, estoy seguro de que el reconocimiento recibido por parte de sus allegados, y del público en general, tienen mayor valía que los de la FIFA.


Hace poco llegó el día de coronar al Barcelona, de concluir aquella obra iniciada por Cruyff a finales de los 80, tras 20 años de lucha, de sacrificio, de más derrotas que triunfos, de múltiples enseñanzas, de desavenencias, de un despliegue excepcional tanto en lo físico como en lo mental, con todo y sus baches incluidos. La final del Mundial de Clubes, antes llamada Copa Intercontinental, era la última parada para el ejército blaugrana. Abu Dhabi era la última ciudad por caer ante su majestad, que impuso su ley con jugadas de ensueño, lejos de la tiranía utilizada por Franco, Hitler, Mussolini, Pinochet et. al. para imponer su dictadura. Barcelona impuso su sello y mostró su poderío de otra manera: amor y respeto al futbol. Ante eso ninguna ciudad fue capaz de resistir. Estudiantes de la Plata mostró que el marrullero, el ratonero, el egoísta, termina por flaquear, recibe cuanto da, y como da poco o nada, recibe poco o nada. Barcelona salió avante una vez más; a punto estuvo de ser ultrajado de su trono, del cetro al cual tenía derecho luego de sus proezas mayúsculas. De haber perdido ese juego, el final no hubiera sido "felices para siempre" como lo es en los cuentos maravillosos. En tiempo extra el futbol y la mente no le bastaban al Barcelona para ser el rey. Coincidencia o destino, el gol del triunfo fue obra de Messi y lo hizo con el corazón (su pecho cubre a ese órgano, por lo tanto hay un simbolismo que le va perfecto a esta historia, la cual en un principio era deportiva y terminó siendo de vida).

En el Reinado Culé seguramente tendrán preparados puestos de honor (dentro de la corte real) para todos aquellos que dieron su vida por el club, entre ellos el Dream Team y su mentor: Johan Cruyff. El legado del Barcelona quedará para la posteridad. Antes sueño, ahora realidad. ¿O todo esto seguirá siendo un sueño? ¡Qué más da! Al final del día tú y yo podemos decir: "¡sí!, ¡yo tambien los vi!"

lunes, 21 de diciembre de 2009

México Insurgente

Reed, Jonh. México Insurgente. Sexta ed., Ed. Porrúa, México, 2001, 241 p.

Excelso. Son pocos los adjetivos calificativos que pueden anteponérsele a esta obra escrita, narrada y vivida por John Reed. Antes de adentrarme en las temáticas más importantes de este texto, tratar de resumirlo y analizarlo, quisiera plasmar en este escrito algunas preguntas que surgieron dentro de mí a medida que le fui dando lectura al libro. Las dudas son las siguientes: ¿cómo fue posible que un periodista norteamericano haya logrado plasmar de una forma tan sublime la idiosincrasia, costumbres y tradiciones de los mexicanos (indígenas la mayoría de ellos)? ¿Cómo pudo estar inmerso tanto tiempo en la guerra? Y como siempre, en todos y cada uno de mis escritos las dudas y preguntas superan en gran proporción a las respuestas o aseveraciones.

Me causó gran admiración y especial atención la manera en la cual John Reed logró conjuntar sus relatos, logró que una parte tan importante de la historia de México fuera de lo más interesante, intrigante, entretenida, descriptiva, emocionante, cautivadora y realista. Lo anterior lo menciono porque generalmente es muy difícil crear en la población un gusto por conocer, entender y valorar su pasado. Un sector importante de la sociedad cree que la Historia, sobre todo la de México, es aburrida, tediosa y que no nos es útil en nuestras vidas, lo cual por supuesto es una idea errónea, ya que debemos tener bien presente en nuestra mente el siguiente dicho: “hay que valorar el pasado, para así entender el presente, y con ello poder planear el futuro.”


México Insurgente se encuentra ubicado en el año de 1913, justo en uno de los años más crudos, duros y sangrientos que la Revolución Mexicana presentó. Se desarrolla principalmente en los territorios del norte del país: Sonora, Chihuahua, Coahuila, Durango, etc. Y cabe mencionar que el autor se encuentra como infiltrado en las tropas constitucionalistas, de las cuales era líder el sagaz Francisco Villa. No sólo el año mencionado, sino el transcurso de años en los cuales se desarrolló la revolución, significan un periodo bastante delicado, gris, tormentoso, sangriento, triste, de descontrol total, de escasez de alimentos, falto de paz, de dinero y sobre todo, de una falta de fe en lo que el futuro le deparaba al pueblo. Sintetizando, la Revolución Mexicana es uno de los periodos más estremecedores y sangrientos que se han suscitado en nuestro país.

En un inicio (antes y durante 1910) se creía que con la expulsión del país de Porfirio Díaz, los problemas terminarían, se acabarían las injusticias en el país y las aguas retomarían sus niveles y regresarían a sus caudales. Error. Surge con mucha fuerza el nombre de Francisco I. Madero, quien llega a la presidencia gracias a su labia y fuerza coercitiva que logró con el pueblo. Sin embargo, su ingenuidad, falta de carácter y poca astucia, fueron aprovechadas por el astuto, abusivo, sanguinario y engreído Victoriano Huerta, quien aprovechándose de la confianza que el líder del ejecutivo le tenía, lo traiciona y da un golpe de Estado dentro de la llamada “decena trágica”. Madero es fucilado, y Huerta en un abuso de poder buscó instaurar un régimen muy parecido al de Díaz. En ese momento, emergen tanto del norte como del sur del territorio mexicano Francisco Villa y Emiliano Zapata respectivamente. Ambos buscan derrocar del poder a Huerta y sus federales (como eran llamados sus soldados), cada uno con sus distintos métodos e ideologías.

Después, suceden en el país una serie de enfrentamientos armados entre los federales y los constitucionalistas. Los primeros luchaban por las clases altas, por los hacendados y la gente que en esos momentos poseía el poder. Por su parte, los segundos luchaban con y por el pueblo, buscaban: una igualdad de clases, una mejor distribución de las tierras, mejoras sustanciales en la educación, un mejor futuro para sus hijos y dejar de ser explotados por la clase alta.

En este momento de la historia es cuando John Reed se adentra en tierras mexicanas y se convierte en un constitucionalista más. Ingresa como corresponsal para su país (Estados Unidos), para llevar información precisa de lo que acaecía en México, ya que los gringos estaban muy interesados en nuestro país, tanto así que en múltiples ocasiones amenazaron con invadir territorio mexicano. Según ellos, era porque pretendían que México estuviera a su altura y fuera su gran socio comercial. Esta fue la versión dada a través de la voz del embajador Wilson.

Reed no era un estadounidense convencional, más bien, era un ser humano sensible, capaz de ver con el alma y no sólo con la vista (que en ocasiones engaña e impide valorar lo intangible), afectivo, inteligente, notablemente preciso en sus intervenciones, tanto de palabra como de acción. Era osado, valiente, mentalmente fuerte y una persona comprometida con su trabajo; ético y honesto consigo mismo y con los demás. Esas características tan especiales le permitieron sobrevivir y sobreponerse a las pruebas de fuego que el destino le puso en pleno desierto mexicano.

Vivió con los indígenas y soldados mexicanos, conocido como Juanito (y no es el payasito de Iztapalapa) o también como el míster (así solían decirle las personas que lo apreciaban y lo habían acogido como si fuese de su familia), logró no sólo describir a aquellas personas, sino que también describió a la perfección su entorno y contexto social, como lo podemos observar a continuación: “es imposible imaginar lo cerca de la Naturaleza que viven los peones en esas grandes haciendas. Sus propias casas están construidas de la tierra que pisan, calcinada por el Sol. Su alimento es el maíz que siembran; lo que toman, el agua que corre por el río que se agota, transportada dolorosamente sobre sus cabezas, las ropas que usan, tejidas de lana, y sus huaraches, de piel de novillo recién sacrificado. Los animales son sus constantes compañeros, familiares en sus casas. La luz y la oscuridad son su día y su noche. Cuando un hombre y una mujer se enamoran, vuelan el uno al otro sin las formalidades del cortejo, y cuando se cansan uno del otro, simplemente se separan. El matrimonio es muy costoso (seis pesos para el cura), lo que se considera como un alarde inútil, que no obliga más que la unión más fortuita. Y, por supuesto, la cuestión de celos significa sangre”.

En esta sensible y exacta descripción del míster, se encuentran casi todos los elementos que representaban al mexicano de la época, pues no sólo describe lugares y personas, también describe las relaciones interpersonales, el amor a sus tierras y animales, su alimentación, sus costumbres, e incluso menciona a la Iglesia, la cual tenía gran importancia y jugaba un papel clave en esta lucha, puesto que, era una de las instituciones que más explotaba y manipulaba al pueblo, sobre todo a través de sus sermones y del famoso diezmo. Menciona con cierto asombro y un dejo de desprecio las fechorías que los curas cometían en contra de la población, y que sin empacho le habían sido reveladas... “alegre ya, su señoría disertaba sobre las virtudes de la confesión, especialmente cuando se refería a las jóvenes. Nos hizo notar también que tenía ciertos derechos feudales sobre las recién desposadas. Las muchachas, aquí -dijo- son muy ardientes…”

Reed siguió narrando las batallas entre las fuerzas constitucionalistas y los federalistas. En primera instancia, las batallas que Urbina (general constitucionalista) sostiene en el estado de Chihuahua, además de todos los inconvenientes por los cuales pasaba día a día, la falta de alimento, el nulo conocimiento sobre dónde se quedaría a dormir y la desconfianza que en ocasiones le tenían por el hecho de ser estadounidense. También fue conociendo las inclemencias del tiempo en pleno desierto y la especial atención que tenían los indígenas con los soldados. Menciona que a pesar de la pobreza, nunca niegan un plato de comida o un petate para los visitantes, se ponían a disposición de todo aquel que luchara por su liberación. Estos gestos tan nobles de los indígenas deslumbraron a John, jamás había visto acto igual, era algo inverosímil, en su país nunca le habían mencionado tales virtudes de la gente del otro lado del Río Bravo.

Posteriormente cuenta cómo junto a sus amigos viaja hacia el sur para seguir liberando las ciudades del yugo huertista, hasta llegar a Gómez Palacio. En la Cadena, pasa uno de los capítulos más difíciles de su estadía en México, el grupo en el que se encontraba es atacado por un número considerable de federales, los cuales estuvieron a punto de quitarle la vida, sin embargo la suerte en ese momento le sonrió -relativamente-, porque aunque logró salir ileso del ataque, algunos de sus más preciados amigos cayeron en la batalla. A pesar de eso, sabía que debía sentirse orgulloso de ellos, pues habían muerto defendiendo sus ideales hasta el último momento.

En su periplo conoce al vanagloriado e idolatrado Francisco Villa, a quien describe de forma muy natural y específica, como si a través de la lectura observáramos su retrato. Antes de ser revolucionario, Villa había sido bandolero y se había convertido en uno de los bandidos más buscados por el régimen porfirista. A pesar de que Pancho careció de toda instrucción escolar, desarrolló capacidades impresionantes como militar, era un gran estratega, de mente ágil, actuaba cuando era debido, luchaba siempre como uno más del batallón.

Antes de que el ejército villista sitiara Gómez Palacio, se guarecieron en Conejos para planear la estrategia a seguir una vez que Villa diera la orden de atacar. En esos momentos Francisco Villa le confiesa que él no aspira a la silla presidencial, que sería una lástima que México tuviera un presidente que apenas sabe leer y escribir (y eso porque lo aprendió mientras estuvo recluido en la capital, después de la muerte de Madero), que no podría platicar ni tomar decisiones conjuntamente con otros ministros o presidentes extranjeros. Lo único que buscaría al terminar la revolución sería obtener una tierra en la cual pudiera sembrar y una casa donde vivir. No deseaba protagonismo dentro del ámbito político.

Acto seguido, se suscitan batallas feroces y de alto impacto, Reed no había sido testigo de tanta violencia durante su estancia. Dichas batallas se libran para conquistar el control de Gómez Palacio. Finalmente el bando constitucionalista se erige como victorioso (¡ojo! No victoriano) y algunos de los huertistas logran huir. Es aquí cuando relata cómo era la rutina dentro de aquellos vagones del tren, en donde se encontraban mujeres, niños, doctores y un séquito bastante cuantioso de heridos, además de los soldados que resguardaban y protegían el convoy.

La guerra no paro ahí, siguió en Torreón (la tierra más próspera del norte de México según el mister). Prácticamente la guerra estaba ganada para el bando villista, sin embargo, el agua y la comida escaseaban sobremanera y la gente había comenzado a desesperarse, la victoria estaba cerca pero aún faltaban ciudades o poblados por caer. Bajo este contexto sale del anonimato Venustiano Carranza, persona de clase alta, pero que se había unido a los pobres para pelear por la libertad. Era un ser inteligente, con una vasta cultura, político de clase y con buen manejo de la palabra.

A pesar de buscar el mismo fin, Villa y Carranza no comulgaban en algunas de sus ideas, por lo cual, Carranza nunca apoyó del todo a los villistas, hecho que creo desconfianza y malestar en varios sectores de la población.

Luego de tanto derramamiento de sangre, sudor y lágrimas, el pueblo de México ganó su batalla contra los federales. Sin embargo no tuvo la capacidad ni el poder para vencer al hambre y a la desigualdad e injusticia social.

Lo puntual e interesante de estas crónicas de guerra es que no sólo están enfocadas en el plano militar, van más allá de lo bélico, logran dar a conocer los sentimientos, sensaciones, pensamientos, creencias e ideologías no sólo de los protagonistas de la guerra, sino también de la gente común y corriente, seres que gracias a textos como el de Reed vivirán para la eternidad. Esta pieza del rompecabezas revolucionario pudo haber sido fácilmente borrada de los anales de la historia, pues en la historia oficial pocas veces se considera a los desposeídos, la memoria colectiva no tiene un lugar privilegiado para ellos -si es que hay un lugar para ellos-. Esos seres que para cualquier otro autor habrían pasado de largo en su camino, fueron para Juanito el centro de su atención, los verdaderos héroes de las hazañas revolucionarias.

viernes, 11 de diciembre de 2009

El MIDE cobra vida


¡MIDE... seo es que te diviertas!

Mi nombre es Museo Interactivo de Economía (MIDE pa' los cuates). Vivo en Tacuba 17, Centro Histórico, dentro de los límites de la delegación Cuauhtémoc, en la ciudad más grande del mundo.

Nací en el despertar del tercer milenio, sin embargo puedo presumir de ser único en el mundo, pues me caracterizo por informar de una forma innovadora, creativa y divertida, sobre una gran diversidad de tópicos que atañen a la economía (nacional e internacional). La banca comercial, junto con el Banco de México y demás organizaciones bancarias, son mis mentores.

Estoy conformado por tres niveles. El recorrido que ofrezco inicia en el tercer nivel, en él los temas más llamativos son: la fábrica de billetes, espacio donde se da a conocer cómo se hacen los billetes que circulan día a día en las manos de las personas, además, los visitantes pueden crear su tarjeta de crédito y su billete de mi banco oficial, Betlemitas; la sala dedicada a numismática contiene monedas de todas las épocas de México como un país libre y soberano, de hecho, también contamos con algunas monedas utilizadas en la Nueva España; el juego de la isla perdida fomenta la correcta toma de decisiones y se pondera la solidaridad ante el egoísmo ascendente en la sociedad mundial; y el simulador de mercado es lo más divertido (según visitantes y Daniel Garfias), pues en su interior se pueden realizar las mismas acciones de compra-venta que en el mercado económico global, regidas por las leyes de la oferta y la demanda, buscando siempre la ganancia para la parte que cada persona representa.

En el segundo piso yacen sobre mis muros y salones videos, textos, carteles, y demás elementos interactivos en los cuales se explica el funcionamiento de las instituciones bancarias de México (léase ABM, BANXICO, banca comercial y banca de desarrollo). También presento información referente a las acciones del Gobierno para satisfacer las necesidades de todos los ciudadanos; la política financiera, fiscal y económica llevada a cabo por el Estado mexicano; y los últimos índices de inflación en toda la República Mexicana.

¿Llegaste a la planta baja? Si es así debo mencionarte lo que aquí he preparado para ti, de manera conjunta con mis guías, diseñadores y expositores. Las diferencias en la distribución de los ingresos y del dinero que fluye en el orbe están representadas con una veintena de imágenes, en las cuales se encuentran retratados los integrantes de la familia junto con los alimentos que componen su despensa. Es notorio el abismo existente en términos de riqueza y variedad de alimentos en familias de E.U., Italia y Polonia, contra familias africanas, sudamericanas, e incluso mexicanas. El desarrollo económico de las naciones es directamente proporcional al poder adquisitivo de sus habitantes. En una maqueta se comparan los niveles de salud, calidad de vida y educación, de diversos países (entre ellos México), y se puede observar la evolución de dichos índices desde 1970 hasta el año 2000. Si tienes alguna sugerencia para mejorar mi rendimiento puedes grabar tu video, eres libre de emitir tu opinión sobre la información, el inmueble o cualquier aspecto que te haya (des)agradado.

La tecnología vertida en mí es para beneficio de todos y cada uno de los visitantes, para que puedan interactuar de manera manual, real y virtual. La tecnología mejora la comunicación entre ustedes y yo, permite la mejor comprensión de los contenidos exhibidos. Cuando estás en mi interior puedes (y debes) ocupar tu razón, tus sentidos y tu movimiento corporal, para aprovechar al máximo tu visita.

Una vez que hayas concluido tu recorrido, puedes pasar a las computadoras a registrarte en mi base de datos, elegir los temas que más te hayan atraído, y yo mismo te enviaré a tu correo electrónico información detallada sobre las temáticas seleccionadas por ti. Es hora de irme, debo seguir atendiendo a los visitantes, un gusto charlar contigo, hasta pronto.